INVESTIGACION CAPTURA DE CARBONO DEL AIRE
Es fácilmente constatable la urgencia apreciada en los sistemas políticos para luchar contra el calentamiento global. En ese sentido, es compartible que no es suficiente renunciar a los combustibles fósiles para reducir las emisiones de carbono y poder frenar el cambio climático El dióxido de carbono debería secuestrarse mejor.
En este esquema, la captura de dióxido de carbono directamente del aire, sería una de las pocas formas de alcanzar emisiones negativas necesarias para limitar el calentamiento global. Sin embargo, el proceso que permite la captura directa de aire, consume energía y es costoso. El alto costo impide la utilización de esta tecnología a gran escala y devora el potencial que tiene para limitar la mayor amenaza ambiental de nuestro tiempo.
En este sentido, la prensa especializada local destaca que se está desarrollando un nuevo tipo de tecnología para la captura del carbono: se aspira directamente del aire y se almacena bajo tierra. Se adjunta vínculo electrónico a articulo científico de 2019 sobre la DAC (captura directa desde el aire): https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fclim.2019.00010/full
En Finlandia, la investigación de campo comenzó en 2014 en el proyecto Neo-Carbon Energy de la Universidad de Ciencias Aplicadas LUT y el Centro de Investigación Tecnológica VTT. Uno de los resultados ha sido la puesta en marcha del sistema Soletair Power, https://www.soletairpower.fi/ cuya tecnología separa el dióxido de carbono de los flujos de aire de ventilación en los edificios.
En 2020, se lanzó un nuevo proyecto, DAC2.0, https://www.dac2.fi/ para estudiar la eficiencia energética de la captura de carbono, materiales y equipos en su conjunto. Una parte importante de la investigación es determinar los efectos a lo largo del ciclo de vida. Es lógico que la construcción y el funcionamiento de las plantas no deben provocar por sí mismas un saldo deficitario de emisiones. Además de LUT y VTT, la Universidad de Jyväskylä también participa en el nuevo proyecto.
En dicho proyecto, se analizan nuevos materiales que pueden usarse para capturar dióxido de carbono. Se trata de marcos metaloorgánicos (MOF), es decir, iones metálicos y compuestos orgánicos que forman estructuras porosas en forma de jaula. Se desea extraer las moléculas de dióxido de carbono del aire primero dentro de los MOF y luego liberarlas en un tanque de recolección.
